Lo oímos por dondequiera que vayamos, está de moda e incluso lo decimos, pero… ¿qué es exactamente un coche híbrido? ¿Acaso hay distintos tipos? Contestamos esas preguntas que siempre quisiste hacer cobre el coche híbrido y nunca te atreviste a preguntar.
Empecemos por lo primero. Como sin duda sabes, todos los vehículos a motor almacenan la energía en un depósito de combustible, e incluyen un mecanismo que permite transformar dicha energía en movimiento con el objetivo de que el coche se desplace y cumpla su función. En los coches de gasolina, sin ir más lejos, el combustible se quema para liberar energía y transformarla en movimiento en el clásico motor de combustión. En el caso de los coches eléctricos, por ejemplo, la energía se almacena en una batería, y es el motor eléctrico el que la convierte en movimiento mecánico. Pero… ¿y los coches híbridos? ¿Cómo lo hacen?
Pues para empezar, debemos saber que un coche híbrido es, precisamente, un vehículo que cuenta nada menos que con dos o más almacenes de energía, y también con sendos mecanismos de transformación de la energía en movimiento, y de ahí su nombre. De hecho, aunque no tenga mucho sentido desde un punto de vista práctico, ¿sabías que un coche con dos motores de gasolina también sería un híbrido?
Pero todo el concepto de un híbrido proviene de una razón muy concreta: que dos propulsores distintos se complementen formando un sistema de propulsión más eficaz o, al menos, con más ventajas que inconvenientes. Y de hecho, aunque es posible, al menos teóricamente, fabricar híbridos gasolina-diésel o, incluso, gasolina-gasolina, la verdad es que no sería demasiado práctico, y es por eso que todos y cada uno de los híbridos que podemos encontrar hoy en el mercado son gasolina-eléctricos, con una pequeñísima cantidad de diésel-eléctricos, aunque están condenados a desaparecer por completo debido las crecientes restricciones medioambientales para este tipo de combustible.
¿Pero cuál es la verdadera ventaja de un coche híbrido? Hemos hablado de eficacia o eficiencia, y ahí está la clave de este tipo de vehículos. Los motores eléctricos son tremendamente eficientes en situaciones donde un motor de combustión interna resulta ineficiente. ¿Y por qué? Porque cualquier motor térmico desperdicia más del 60% de la energía, mientras que la eficiencia para los motores eléctricos está cerca del 97%. Y porque mientras que un propulsor de gasolina o de diésel es claramente unidireccional (la energía solo fluye en una única dirección y nunca regresa), los motores eléctricos son bidireccionales, es decir, son capaces de transformar la energía eléctrica en movimiento de propulsión, pero también recuperar dicho movimiento al frenar, convirtiendo la inercia del vehículo en energía eléctrica que vuelve a almacenarse en las baterías.
Así que está claro que la mayor eficiencia y el menor consumo son las principales ventajas de los motores híbridos pero, ¿y las desventajas? Pues alguna hay, como su mayor peso, el mayor coste inicial y una fiabilidad sensiblemente menor, pues se trata de un sistema tecnológicamente más complejo.
2 Respuestas
Eduardo Domínguez
La verdad es que lo de los híbridos es una revolución. Están teniendo una gran penetración en nuestras carreteras aunque desde mi punto de vista aún queda bastante para equilibrar la balanza con los diesel y los gasolina. ¡¡Esperemos que sea verdad eso de que son más respetuosos con el medio ambiente!! Yo de momento mantengo mi Lancia que le quedarán como mucho 4 años, despues ya me pensaré lo de los híbridos!! 😀
Desguaces La Torre
¡Muchas gracias por tu comentario, Eduardo!